lunes, 14 de septiembre de 2009

SIEMPRE NUESTRAS, SIEMPRE UNICAS.

La satisfacción de escribir.

En cada uno de los libros que apoyados en una mesa, o en una estantería, en aquellas notas de un cuaderno, o en las miles de hojas escondidas a la espera de ser leídas, existe un punto en común, algo que los referencia,

contienen todas ellas al ESCRITOR.

Muy pocos son los que tienen la suerte de ser leídos masivamente,
muy pocos los premiados por la fama,
cada uno al escribir da un testimonio,
mas allá de compartir,
es algo que trasciende a nuestro ser físico,
y esas letras son NUESTRAS
y su primer valor esta dentro de quien las plasmó y les dio vida en el papel.

ÚNICAS,
para el escritor son y serán: ÚNICAS,
aceptan cualquier tipo de critica y aun así no dejan de perder la identidad de ÚNICAS.


Quién puede censurar el escribir, solo el autoritarismo y sus lacayos, la IGNORANCIA.





El siguiente texto es un homenaje a todos aquellos que se quieren expresar por medio de la palabra escrita, SIN NINGÚN TIPO DE DISTINCIONES


Apelo a la honestidad y a la no agresión, apelo a ese niño que escribe su primer poesía y a quien quiere contar algo sólo como él sabe hacerlo, al reconocido y al esperanzado, siempre el RESPETO, del escritor y del lector. Anímese, seguro que se llevara una sorpresa y no dude de que lo que escribió es BUENO.

Que no se apague la ILUSIÓN



"Mientras escribo me siento justificado; pienso: estoy cumpliendo con mi destino de escritor, mas allá de lo que mi escritura pueda valer. Y si me dijeran que todo lo que yo escribo será olvidado, no creo que recibiría esa noticia con alegría, con satisfacción, pero seguiría escribiendo, ¿para quien?, para nadie, para mi mismo."



Jorge Luis Borges

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